Desde mañana no lo sé

Es bueno volver al mundo real, cuando uno responde de forma erronea a las incoherencias del mundo, te dicen, te obligan, te ignoran, fingen que te ignoran, fingen que importas y todo para después pensar en si mismos. No me importa que suceda con el tiempo, siempre y cuando esté conciente de lo que sucede y como respondo a eso. Hoy solo me basé en holgazanear en casa, escupir mentalmente a los que me vuelven loco y pensar en los buenos momentos. Una desintoxicación, una limpieza general comienza en ceros y poco a poco se van viendo los errores (no le hubieras inflado el ego, no le hubieras hecho caso, no te hubieras dejado manipular, te hubieras ido antes, no le hubieras prestado, no le creas a todo lo que te dice, etc.) y en un momento dado toca ver los errores de los demás aunque eso siempre, siempre queda en segundo lugar. Todo tiene que ver con como te lo tomas, tu tienes a la persona y nadie te exige sentir algo, ni siquiera indiferencia. Extrañamente la gente tiende a buscar una reacción frente a una persona y lo critican, lo adoran, lo minimizan, lo valoran pero jamás se dan la oportunidad de ver al individuo como sujeto y se la pasan cambiando sus sentimientos, profundizándolos, transformándolos, calificándolos, tratando de controlarlos con sentido común, al final nadie nos exige nada, lástima que sea tan difícil erradicar lo que sentimos.

Fragmento de Diario de un hombre virgen

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